La flauta dulce de madera es muy popular desde la Edad Media hasta finales del Barroco.
Fue quedando relegado su uso al desarrollarse la orquesta clásica, poblada de instrumentos más sonoros.
A partir del siglo XX retorna de los museos, en principio por el interés de interpretar la música renacentista y barroca con sus instrumentos originales, pero su difusión mundial se basa en las posibilidades pedagógicas como herramienta para la iniciación musical.
Medida:33cm